Friday, February 22, 2008

Voto útil



Los artistas bien pensantes, representantes del buen rollito, de lo políticamente correcto con pequeñas pinceladas de pose “canalla”, del canon y la SGAE, etc. presentaron recientemente, bajo las preciosas siglas de PAZ, la “Plataforma de Apoyo a Zapatero”. No es intención de este artículo criticar a estos artistas, que cambiaron su apoyo al PCE por la apología del mal llamado “voto útil”. Tampoco voy encaminado a la crítica de estas formas de marketing electoral en el que la política queda reducida a un mero espectáculo televisivo en el cual se vende un “producto”. Mi crítica va dirigida hacia otros aspectos.




La susodicha plataforma PAZ (el nombre se las trae) se presenta a sí misma como una plataforma de apoyo a Zapatero, no al PSOE... Vale, suena a chiste, pero así es como se anuncian. Ahora me voy a enterar que el Estado español tiene un sistema presidencialista. ¡Y yo que creía que era parlamentario! Comprendo que muchos canarios, poco politizados, pero que se consideran a sí mismos de izquierdas, tienen una especial simpatía hacia Zapatero, quien ha sabido explotar muy bien su imagen de “talante” y “buen rollito”, y por ello te manifestarán su intención de “votar a Zapatero”. Aún sin apoyar yo lo más mínimo la figura de Zapatero, siento mucho decirles a esa gente que en ninguna de las listas que un canario pueda votar aparece el actual presidente del Estado español, de hecho, un canario “occidental” (¡dichosa división privincial!) autoconsiderado de izquierdas que vote por el PSOE, estará votando a José Segura Clavel, personaje que para nada es de izquierdas (hasta incluso podríamos utilizar otro calificativo que empieza por “F”).

Pero lo más preocupante es la utilización, por parte del PSOE, del miedo a un hipotético gobierno del PP. Es cierto que un gobierno del PP puede suponer un aumento de la represión (aunque el PSOE no se queda corto en ese aspecto) e incluso un retroceso en las libertades, pero lo que no es de recibo es ese miedo que se pretende inculcar con el discurso de “si no votas al PSOE posiblemente el PP ganará las elecciones”. Es el mal llamado “voto útil” un mero instrumento para asegurar que el sistema no será nunca cuestionado. La estrategia de conducirnos hacia el bipartidismo está bien calculada, bipartidismo entre la cara amable del neoliberalismo representada por el PSOE, y la cara ultraconservadora del mismo neoliberalismo representada por el PP. Al final la política económica va a ser la mismas, y ambos defenderán a ultranza el mismo sistema capitalista, con un estado centralista y represor, evitando a toda costa que las voces críticas con el sistema puedan tener representación institucional. Y en un tercer lugar tenemos a una Izquierda Unida cada vez más moderada convertida en un mero apéndice del PSOE.

Sin embargo hay algo que el sistema no podrá evitar, y ello es el surgimiento de los conflictos nacionales dentro del centralista Estado español. Y la izquierda contestataria, que lucha contra el actual sistema capitalista, tiene que tener bien presente la cuestión nacional y no reproducir los esquemas del españolismo, más aún en el caso canario, donde además de una opresión nacional vivimos una opresión colonial, cuya superación pasa inexorablemente por la independencia. Y por ello la izquierda transformadora y soberanista ha de luchar para evitar que el sentimiento nacional sea aprovechado por regionalistas y nacionalistas de derechas cuyo fin es seguir reproduciendo el mismo el mismo sistema opresor basado en la explotación de la mayoría de la población por parte de la minoría detentadora de todos los resortes del poder político y económico. El único voto útil es aquel que sirva para transformar la sociedad.

El Sindicato de Estudiantes Canario denuncia que el Consejo de Estudiantes no es más que un instrumento del rector



La reunión constituyente del pasado miércoles 20 de febrero confirmó las sospechas en torno al verdadero significado del Consejo de Estudiantes. El Sindicato de Estudiantes Canario (SEC) denuncia que, tal y como había predicho, el llamado Consejo de Estudiantes no es más que un instrumento del rector muy alejado de las funciones de órgano estudiantil que se le atribuyen.

La propia concepción del Consejo que aparecía ya reflejada en el Reglamento, como la poca claridad en lo que respecta a sus competencias, el hecho de que no sea un órgano representativo. o el que dicho órgano esté presidido por el rector, generaron desconfianza o rechazo por parte de algunos grupos claustrales entre los que se encontraba el Sindicato de Estudiantes Canario.

Lejos de ser un punto de encuentro y debate entre el estudiantado, se trata de un instrumento de control del estudiantado por parte del rector, con el peligro de que en un futuro puedan incluso darse prácticas de clientelismo. No hay tampoco contacto directo entre el Consejo de Estudiantes y el resto de órganos de la Universidad, es el rector quien traslada supuestamente las consideraciones del Consejo, convirtiéndose este en un instrumento mediante el cual se canaliza la “voz del estudiantado” adecuándola a los intereses del equipo de gobierno. Dentro del órgano el debate entre estudiantes fue inexistente, tan sólo exposiciones dirigidas directamente al rector quien respondía sin comprometerse en ningún momento sino respondiendo “ya se estudiará”. 

Además, como ya dijimos, los miembros del Consejo de Estudiantes no son elegidos por el estudiantado, con lo cual este órgano carece totalmente de representatividad, con el peligro añadido de que puede llegar a suplantar funciones de otros órganos que sí son representativos como el Claustro, donde el estudiantado elige a sus representantes democráticamente. 

En Aguere a 22 de febrero de 2008.

Thursday, February 21, 2008

¿A quién beneficia la abstención?


Este artículo está elaborado a partir de un debate público en un foro de internet. Dado que las formas comunicativas en un debate por medio de foros tienen una serie de características propias (como el empleo de un lenguaje más coloquial), puede que el resultado de su publicación en forma de artículo ofrezca algunas deficiencias, sobre todo en lo que al empleo de la ironía se refiere. De todas maneras, ya que las intervenciones de José Luis Valdés fueron publicadas ya en forma de artículo, me decido a adaptar las mías a fin de hacerlas publicables en páginas de información digital.

Con frecuencia, desde sectores independentistas y revolucionarios oímos argumentaciones contrarias a la participación de esta opción política en las elecciones. La argumentación suele simplificarse de la siguiente forma "la participación en las elecciones legitima al sistema, por lo tanto, debemos optar por la abstención como forma de rechazo al mismo".

El sistema "democrático" burgués y colonial sigue igual de legitimado si las personas críticas con dicho sistema se abstienen. Fijémonos, por ejemplo, en los altos niveles de abstención que hay en el municipio de Santa Cruz de Tenerife. ¿El sistema se ve dañado con esa abstención? Zerolo sigue ahí, con sus amplias mayorías y (auto)legitimadito que da gusto. Además, dado el escaso porcentaje de personas concienciadas, una campaña, aún siendo fuerte en relación a nuestros escasos medios, apenas variaría los niveles de abstención comunes en todas las citas electorales.

Ahora bien, la cuestión que planteo es la siguiente: ¿No se deslegitima más al sistema burgués y colonial votando una candidatura que cuestiones dicho sistema burgués y colonial?

Utilizando un poco de humor, pongamos el siguiente ejemplo de resultados ficticios, de un lugar ficticio:



Caso 1:

Abstención: 70% (normalmente suele estar en

63%)
Participación: 30%
Votos nulos: 0,5%
Votos blanco:
0,5%

CoCa y Jaco: 35 %
Unión Democrata Centro-Fascista: 28%
Partido de Socios en una Lista: 30%
Los Inmaduros: 2%
Partido de Gaspi: 1,5 %
A lo Mejor Quizás es Posible que Se Pueda: 1,5 %
Otros: 1%






Caso
2:

Abstención: 60%

Participación: 40%
Votos nulos:
0,5%
Votos blanco: 0,5%

CoCa y Jaco: 35 %
Unión Democrata Centro-Fascista: 28%
Partido de Socios en una Lista: 30%
Los Inmaduros: 2%
Partido Independentista Anticaciquil Marxista Revolucionario del
Proletariado: 10%
Partido de Gaspi: 1,5 %
A lo Mejor Quizas es Posible que Se Pueda: 1,5 %
Otros: 1%


¿En cuál de los dos casos queda el sistema más deslegitimado? ¿No deslegitima más al sistema el que una opción antisistema obtenga apoyo?

Obviamente, hasta que no tengamos base social suficiente, no podremos conseguir representación, pero precisamente las elecciones son una oportunidad para hacer aumentar dicha base social. Participando electoralmente al menos tendremos espacio para poder hacer nuestra campaña y hacer llevar nuestro mensaje.En caso de que propugnemos la abstención, nuestra voz crítica casi que ni se oirá, como si no existiéramos.

Existe una cosa que se llaman espacios gratuitos de propaganda electoral y que se emiten en las televisiones públicas, algo que no existe en los 365 días al año. Es legítimo aprovechar tales espacios.
Más bien parece que muchas de las apuestas por la abstención es más bien de moral personal, es decir, moralmente determinadas personas se sienten bien absteniéndose en las elecciones. Yo creo que deberíamos dir más allá, sí basamos toda nuestra actividad política en actuar tal y como nos sintamos mejor personalmente no llegamos a ninguna parte.
Y repito, a ojos del sistema la democracia burguesa queda igual de legitimada aunque los independentistas nos abstengamos.

(*) (respuesta a los artículos de José Luis Valdés
http://elguanche.net/Ficheros2/antedivisionindependentistajlv.htm
http://elguanche.net/Ficheros2/porquelaabstencionjlv.htm)

Queda tanto

Nueva canción de Dailos Tamanca.