Monday, May 29, 2017

Frente a Frente - 24 de mayo - El Salto

Programa Frente a Frente correspondiente al 24 de mayo de 2017, presentado por Dailos González.

En este ocasión hablamos con Pablo Elorduy de un nuevo proyecto comunicativo, El Salto, heredero de otros proyectos comunicativos como el Periódico Diagonal. El Salto es un nuevo periódico que funciona de modo cooperativo y que se edita mensualmente en papel, y que contará también con su versión web diaria.

Acompañamos el programa con música de Paco Ibáñez, The Cuban Brothers, Marc Anthony, Men at Work y The Specials, así como el Disparando palabras semanal de Daniel Olivera.

Sunday, May 28, 2017

El consejero Dailos González presenta una moción pidiendo que se garantice el derecho a la Prestación Canaria de Inserción

• La moción va en la línea de la ya aprobada por el Cabildo Insular de Tenerife

El consejero no adscrito Dailos González Díaz presenta una moción en el Cabildo Insular de La Palma en la que se pide se garantice el derecho a la Prestación Canaria de Inserción y se dote a las instituciones de personal suficiente y financiación para hacerla efectiva. Dicha moción será debatida en el pleno a celebrar el lunes 29 de mayo.

La moción va en la línea de la ya debatida en el Cabildo Insular de Tenerife el pasado mes de abril, y que tras una serie de enmiendas fue aprobada en sesión plenaria.

Entre los puntos de dicha moción está el exigir al Gobierno de Canarias el aumento de las partidas presupuestarias destinadas a la Prestación Canaria de Inserción (PCI) “en la cuantía necesaria para asegurar la cobertura de la demanda existente” así como que “amplíe el plazo de duración de la misma, prorrogándola de forma automática mientras persista la situación de precariedad económica que dio lugar a su concesión”. Además, se pide el compromiso de impulsar planes comarcales de desarrollo integral que incluyan la potenciación de servicios de cuidado, redes de apoyo comunitario, iniciativas de cooperación social y alternativas de economía social y creación de empleo, con el fin de contribuir a la integración social de las personas perceptoras de PCI.

Esta moción parte de una crítica al actual funcionamiento de la PCI, pues “se ha convertido casi en una estafa” debido a las trabas que dificultan y/o impiden que muchas familias lleguen a cobrarla, pues sólo se percibe en uno de cada mil hogares canarios, llegando apenas al 17 por ciento de la población que podría acceder a esta ayuda y a una de cada tres personas en riesgo de pobreza. Como dato a tener en cuenta, a día de hoy la PCI sólo alcanza al 0,5 por ciento de la población en pobreza o exclusión, situada en unas 700 mil personas en las Islas. 

Por eso, la moción pide al Gobierno de Canarias y a los ayuntamientos que incrementen la dotación de profesionales responsables de la atención a demandantes de PCI, que garanticen la estabilidad de dicho personal y mejoren el proceso de tramitación, acortando el tiempo de espera y asegurando su resolución en tiempo y forma.

Canarias es uno de los territorios más empobrecidos y desiguales del Estado español y de toda la Unión Europea. Según los datos de la Encuesta de Población Activa (EPA) del primer trimestre de 2017 la tasa de desempleo de Canarias es del 25,85 por ciento, siete puntos más que la media estatal (que es del 18,9 por ciento) y un punto de subida de desempleo en relación al trimestre anterior. 

Además, la crisis ha dejado a más de 58.000 hogares canarios sin ningún tipo de ingresos, que la mitad de demandantes de empleo no tienen derecho a prestación ni subsidio y el número de personas paradas de larga duración se triplicó entre 2016 y 2017. “Esta situación es realmente alarmante”, señala Dailos González, por lo que la solución no se encuentra únicamente en la PCI, sino que debe proponerse también “un Sistema de Garantía de Rentas como derecho subjetivo, individual, sin limitación de tiempo, y con una cuantía equivalente como mínimo al SMI, para aquellas personas que no tienen ingresos, de implementación progresiva, que unificaría y optimizaría las diferentes modalidades de prestaciones económicas no contributivas, asegurando unas condiciones materiales de vida dignas a todas las personas”.

La propuesta de acuerdo presentada al Cabildo para ser debatida en pleno es la siguiente:

1. Exigir al Gobierno de Canarias el aumento de las partidas presupuestarias destinadas a la Prestación Canaria de Inserción, tanto para aumentar el número familias a las que llega, efectivamente, la prestación, y para que su percepción sea inmediata (un mes y , en cualquier caso, apoyo en los posibles meses de espera) para todas las personas que tienen derecho a percibirla, así como para incrementar el personal dedicado a la gestión ágil y eficaz del procedimiento y a apoyar la inserción social, educativa y laboral vinculada a la ayuda en los ayuntamientos. Asimismo se hace imprescindible aumentar su duración actual de dos años al tiempo que sea necesaria en cada caso, esto es, mientras las personas beneficiarias no tengan otros ingresos, e incrementar la cuantía hasta aproximarse al SMI.
2. Instar de forma paralela desde el Gobierno de Canarias al Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas para que autorice a las administraciones competentes a contratar de manera continua y estable el personal necesario para garantizar el derecho de la ciudadanía a percibir la Prestación Canaria de Inserción y que las personas beneficiarias reciban en tiempo y forma esta ayuda.
3. Instar a todos los ayuntamientos de la Isla a aumentar la partida presupuestaria municipal dedicada a la Prestación Canaria de Inserción.
4. Instar a los ayuntamientos a implementar un protocolo que permita reforzar el trabajo en red y optimizar los recursos ya existentes en cada municipio y la puesta en marcha de nuevos proyectos para establecer itinerarios de integración social, educativa y laboral de todas las personas que perciben la PCI en su ámbito territorial.
5. Exigir a los parlamentos y a los gobiernos estatal y canario que pongan fin a las políticas neoliberales, den marcha atrás a los recortes presupuestarios en servicios públicos esenciales y garanticen los derechos sociales de la ciudadanía.
6. En particular, instar a dichas administraciones a implementar un Sistema de Garantía de Rentas como derecho subjetivo, sin limitación de tiempo, y con una cuantía equivalente como mínimo al SMI, que unificaría y optimizaría las diferentes modalidades de prestaciones económicas no contributivas, asegurando unas condiciones materiales de vida dignas a todas las personas.

Saturday, May 20, 2017

Frente a Frente - 17 de mayo

Programa Frente a Frente correspondiente al 17 de mayo de 2017, presentado por Dailos González.

En este programa escucharemos el Disparando palabras de Daniel Olivera, esta vez combinado con el jazz de Nueva Orleans de Magnificient Seventh, el punk canario de Ataúd Vacante y un tema del cubano Silvio Rodríguez con Irakere. También escucharemos el clásico de rock progresivo "Close to the edge" de Yes, así como al grupo de punk-ska grancanario The Monos, y a la fusión entre folclore colombiano y música electrónica de Bomba Estéreo.

Ana León nos hablará de las Marchas por la Dignidad y, concretamente, de la convocatoria para la isla de La Palma realizada por distintos movimientos sociales.
 

Tuesday, May 16, 2017

Frente a Frente - 10 de mayo - Huelga de hambre en defensa de Tindaya

Programa Frente a Frente correspondiente al 10 de mayo de 2017, presentado por Dailos González y Pedro el Gasio.

En esta ocasión, tras denunciar en nuestra introducción las nuevas formas de explotación laboral bajo la modalidad de aprendizaje de becarios y becarias, entrevistamos a Tosky Weller y Federico Macher, dos activistas que han iniciado una huelga de hambre en defensa de la montaña de Tindaya y que, actualmente, se encuentran junto a dicha montaña. Recordamos la situación de la montaña y el por qué esa reivindicación.

Acompañamos el programa con música de Julius Fu?ík, Art Bakley & Jazz Messengers, Víctor Manuel, Rogelio Botanz, Dadda Wanche con Abel Cordovez y David Mahoh, Residente con Bombino, y Achicatnas. Además el "Disparando palabras" semanal de Daniel Olivera. 

Monday, May 15, 2017

Moción sobre la prestación canaria de inserción

MOCIÓN PARA GARANTIZAR EL DERECHO A LA PCI
Y PARA AVANZAR HACIA UN SISTEMA DE GARANTÍA DE RENTAS EN CANARIAS


Como siempre, junto a la parte dispositiva de la moción presento una exposición de motivos, fruto del trabajo realizado por compañeras y compañeros de distintas islas, que ayuden a comprender el por qué de esta moción y, a su vez, aporte algunos datos a tener en cuenta a la hora de empezar a trabajar en caso de que sea aprobada.

Pobreza y desigualdad social en Canarias

Canarias es uno de los territorios con mayores índices de empobrecimiento y desigualdad del Estado español y de toda la Unión Europea. Mientras que en nuestro archipiélago se baten récords de ingresos en el sector turístico, la tasa de desempleo sigue siendo muy alta y la precariedad laboral aumenta.

Algunas de las consecuencias más graves del evidente fracaso del modelo neoliberal en nuestra tierra son las enormes tasas del desempleo y la precarización laboral (incluso en momentos de supuesta bonanza) que, a su vez, empeoran o provocan otras complejas problemáticas sociales.

Según el estudio “Desigualdad, pobreza y cohesión social en Canarias. Análisis de su incidencia y distribución entre la población canaria. Informe realizado para el Comisionado de Inclusión Social y Lucha Contra la Pobreza del Gobierno de Canarias” (julio de 2016), nuestras islas destacan en el contexto autonómico estatal, además de por menores niveles salariales, por una gran desigualdad, así como por una elevada tasa de incidencia del empleo de bajos salarios, lo que se traduce en una mayor prevalencia de situaciones de riesgo de pobreza entre las personas ocupadas (pobreza laboral o in-work-poverty).

 A continuación, exponemos algunos datos que avalan estas afirmaciones:

 Según la Encuesta de Población Activa (EPA) del cuarto trimestre de 2016, la tasa de paro en Canarias es del 24,5%, frente al 18,63% del conjunto del Estado.

Según el OBECAN, el número de personas paradas según Paro SEPE a marzo de 2017 se sitúa en 230.779, que son sólo las personas apuntadas como demandantes de empleo,  dato que no coincide con el paro real que mide la EPA y que siempre es mayor, pero que es una información no disponible a día de hoy porque el INE aún no ha publicado la EPA del primer trimestre de 2017.
Canarias es una de las comunidades autónomas con mayor índice de pobreza, el 28,5% según la última Encuesta de Condiciones de Vida (2016) del Instituto Nacional de Estadística, mientras que la media de pobreza estatal es del 22,1%. En nuestro archipiélago, el índice de pobreza creció un punto respecto al año anterior. 

Según esta misma encuesta, el número de hogares que reconocen que pasan muchas dificultades para llegar a fin de mes casi se ha duplicado en el último año en Canarias, al pasar del 19,5% al 34,5 %, el porcentaje más alto de todo el Estado español.
Canarias es también la comunidad autónoma donde más hogares admiten que no tienen capacidad para afrontar gastos imprevistos, el 67,7 % (28 puntos por encima de la media estatal, que está en 39,4 %).

Los hogares canarios figuran, asimismo, a la cabeza del Estado en dificultades para pagar los gastos asociados a la vivienda, como alquiler, hipoteca, comunidad o recibos de energía: el 18,1% se ve en esa situación, el doble que la media española (9,4%).
Desde 2010, los salarios del empleo principal en Canarias no dejan de disminuir, siendo en 2014 un 13,8% inferiores (259,69 euros menos) que la media estatal.

El salario medio de los empleos a jornada parcial en 2014, fue un 18% inferior en Canarias que en el conjunto del Estado.

Sin embargo, no se trata de un empobrecimiento generalizado que afecta a todos los sectores de la población, pues muchas veces, el aumento de la pobreza es paralelo a un aumento de la riqueza entre la minoría más privilegiada de la sociedad. Es decir, los pobres cada vez más pobres y los ricos cada vez más ricos, y no es un dato que nos estemos inventando.

Según REDESSCAN, Red Canaria en Defensa del Sistema Público de Servicios Sociales, entre 2007 y 2012 aumentó un 25% la brecha entre ricos y personas empobrecidas en Canarias.
Según se deduce de la lista Forbes, los cinco hombres más ricos de Canarias podrían gastarse un millón de euros al día. Mientras, unas 150.000 personas en nuestras islas sobreviven sin ningún ingreso.

Sin embargo, la respuesta que se está dando desde las administraciones públicas a las situaciones de desigualdad, pobreza, vulnerabilidad y exclusión social no está a la altura de lo que la realidad social demanda.

La Ley de la Prestación Canaria de Inserción (PCI)

La Ley 2/2015, de 9 de febrero, de modificación de la Ley 1/2007, de 17 de enero, por la que se regula la Prestación Canaria de Inserción realiza en su exposición de motivos, entre otras consideraciones, las siguientes:

 “Entre las resoluciones del Parlamento de Canarias adoptadas el 29 de julio de 2013, en relación con la Estrategia Canaria frente a la Pobreza, la Exclusión Social y a favor del Desarrollo Humano 2013-2015, se encontraba la de “modificar de forma urgente la Ley 1/2007, de 17 de enero, por la que se regula la Prestación Canaria de Inserción (PCI), con el objeto de:
– Ampliar el colectivo destinatario de la misma a todas aquellas personas que no dispongan de recursos económicos y estén en riesgo de exclusión social.– Garantizar el acceso rápido y efectivo a la ayuda que supone la PCI a las personas que lo solicitan, estableciendo por ley un plazo de dos meses para resolver las solicitudes desde su recepción por parte del departamento del Gobierno.– Simplificar procedimientos y acortar tiempos de respuesta, mejorando la aplicación informática empleada para su tramitación y gestión”.
Igualmente desde la citada estrategia se hace hincapié en señalar que “es indispensable procurar una respuesta más inmediata y efectiva a los solicitantes, agilizando el actual procedimiento mediante la simplificación de trámites y documentos a presentar”.

Mientras, en su artículo 1, la Ley 2/2015 plantea que:

“La presente ley tiene por objeto regular, en el ámbito territorial de la Comunidad Autónoma, la Prestación Canaria de Inserción, para conseguir la inserción social, económica y laboral de aquel sector de la población en situación de exclusión social o en riesgo de estarlo, que proporcionará:Una prestación económica, que recibirá el nombre de ayuda económica básica, cuya finalidad es ofrecer cobertura a las necesidades básicas de la vida a quienes, por carecer de recursos materiales, se encuentren en situación de mayor desigualdad social respecto al promedio de la población canaria.Apoyos a la integración social mediante la realización de actividades de inserción, dirigidas a transformar o prevenir situaciones de necesidad relacionadas con dificultades de inserción social, laboral y escolar, o ligadas a razones de desestructuración familiar, educativa, o desajustes personales”.
Y el artículo 39 de la misma ley, define las competencias de los Ayuntamientos respecto a la PCI:
“a) La detección de las personas en situación o riesgo de exclusión y la puesta en marcha de las acciones asistenciales y rehabilitadoras que posibiliten la inserción social de las mismas.b) La recepción de las solicitudes y la tramitación administrativa de la Prestación Canaria de Inserción en su fase de iniciación del procedimiento.c) La elaboración de los informes sociales y la elaboración del documento que contenga los programas específicos de actividades de inserción dirigidos a la unidad de convivencia, o en su caso, a alguno de sus miembros.d) El seguimiento de los beneficiarios de la Prestación Canaria de Inserción y el control del cumplimiento de las obligaciones y requisitos exigidos en la presente ley, y en particular, el seguimiento de la participación de las personas incluidas en los programas específicos de actividades de inserción dirigidos a la unidad de convivencia.e) La cooperación con la Administración autonómica en la fijación de criterios de uniformidad en la tramitación de los expedientes, así como en la aplicación de las medidas contempladas en la presente ley, y, en su caso, en las normas de desarrollo”.
Sin embargo, del planteamiento de esta ley a su aplicación real, hay un largo trecho que intentaremos detallar a continuación.

La estafa de la Prestación Canaria de Inserción (PCI)

La Ley Canaria de la PCI se está incumpliendo gravemente. Cada día recibimos quejas de personas que se sienten estafadas y engañadas porque cualquier parecido entre lo que establece la norma y la realidad es pura coincidencia.

La Prestación Canaria de Inserción es una prestación del Gobierno de Canarias. Dicha Prestación debería llevar aparejada una partida económica suficiente para poder ser desarrollada por las Corporaciones Locales en los términos que marca la ley. En la actualidad esto no es así.

Desde el año 2012 la aportación económica para la PCI del Gobierno de Canarias a los municipios ha ido descendiendo. Con esta aportación económica del Gobierno de Canarias es del todo imposible para los ayuntamientos mantener una plantilla suficiente, en términos cuantitativos, para la gestión de la PCI y, aunque muchos ayuntamientos están realizando un importante esfuerzo para poder contratar a la plantilla de trabajadores/as de la PCI, muchas veces este número de trabajadores/as es del todo insuficiente para gestionar esta prestación en lo relativo a los acompañamientos, intervenciones y seguimientos que promuevan la integración socioeducativa y socio-laboral de las personas perceptoras. Por lo tanto, hay imposibilidad, en las condiciones actuales, de poder realizar todas las tareas de promoción e inclusión social de las personas perceptoras.

En relación a los presupuestos de Canarias 2016, el director de Cáritas consideraba que "no era la prioridad del Gobierno de Clavijo incorporar a las personas en situación de exclusión social".

La crisis en Canarias  ha dejado a más de 58.000 hogares sin percibir ningún tipo de ingreso y el 50% de demandantes de empleo no tienen derecho a prestación ni subsidio. En febrero de 2016 el número de personas paradas de larga duración era el triple que en 2007.

Según el segundo informe de la situación de los servicios sociales en las Islas elaborado por la Red Canaria en Defensa del Sistema Público (Redesscan), presentado en diciembre de 2015, sólo en uno de cada mil hogares canarios se percibe la prestación canaria de inserción, únicamente la cobra el 17 % de la población que podría acceder a dicha ayuda y una de cada tres personas en riesgo de pobreza. 

La PCI sólo alcanza al 0,5% de la población en pobreza o exclusión. Así, un total de 600.000 personas en Canarias estaban en riesgo de exclusión social y la pobreza severa había subido un 8 por ciento.  En el periodo 2010-2015 "la demanda en servicios sociales había aumentado en un 40 % y sin embargo, se habían reducido en 500 el número de trabajadores sociales”, de manera que “la ratio es de un trabajador social por cada 16.000 personas cuando lo recomendable es de uno por cada 3.000 personas".

Estas situaciones afectan de forma más intensa a los sectores más vulnerables de la sociedad como son las mujeres, menores y mayores. Aunque en los datos sobre exclusión social no hay desglose por sexo sabemos que la feminización, el rostro  de la pobreza en Canarias "es el de una mujer, entre 29 y 45 años, sola, con uno o dos niños a su cargo". En el año 2016 se hablaba de 13.000 familias, en las que existen  9.100 menores en riesgo de exclusión social. Ser mayor con escasos recursos aboca a la pobreza y ser mujer mayor sin o con escasos recursos implica con mucha probabilidad una situación de pobreza y/o exclusión.

Pese a que en 2016 se firmó un acuerdo con la Federación Canaria de Municipios para destinar más de 12 millones de euros al Plan Concertado de Prestaciones Básicas y a la gestión de la PCI para garantiza la atención a las personas con mayores necesidades, las dotaciones siguen siendo claramente insuficientes y su gestión adolece de serias dificultades.

En esta situación es imprescindible realizar una seria reflexión sobre el sentido de la PCI en la situación socio-económica actual y en las condiciones en las que los Ayuntamientos realizan las tareas que se especifican en la legislación actual por falta de la financiación que debe llevar aparejada la propia Prestación.

Es incalculable el número de personas en listas de espera, dado que en el procedimiento establecido, no se procede al reconocimiento como demandante de esta prestación hasta que las unidades de trabajo social municipales no comienzan la tramitación de las mismas, y para acceder a dichas UTS se puede tardar un tiempo imposible de reconocer.

Son muchas las informaciones que demuestran que se está incumpliendo gravemente lo establecido en la ley pero la realidad todavía es mucho más dura. Si bien consideramos la legislación y las estrategias de lucha contra la pobreza y la exclusión trazadas por quienes gobiernan y han gobernado en Canarias absolutamente insuficientes, lo mínimo que se les puede exigir es que las cumplan.

Todo el sistema está configurado, en teoría, para que la PCI sea la piedra angular de contención que frene la deriva de situaciones de precariedad económica a las de exclusión social. Pero, en la práctica, las administraciones públicas implicadas están poniendo tan pocos recursos humanos para gestionarla que todo el sistema está colapsado:

Solamente cobra la prestación un porcentaje muy bajo de las familias que tendrían derecho a percibirla.

Su abono se realiza con muchos meses de retraso en algunos ayuntamientos, sobre todo, en los de mayor población del área capitalina o metropolitana.

No se está apoyando los procesos de integración socio-laboral vinculados a la ayuda.

La situación expuesta no es nueva, ha sido semejante en toda la última década desde que se aprobó la Ley 1/2007, de 17 de enero, por la que se regulaba la Prestación Canaria de Inserción.

No podemos mostrar solamente la cara crítica con el Gobierno de Canarias porque esta realidad tiene también su lado crítico, según el ayuntamiento de que se trate, pero estos pueden ser algunos rasgos:

Puede haber meses en que no haya nadie que gestione la PCI en los ayuntamientos, lo que supone otro flagrante incumplimiento de la ley.

En los Servicios Sociales municipales se dedica la inmensa mayoría del tiempo a tramitar ayudas puntuales, por lo que no hay un enfoque hacia una intervención social integral, de la que la PCI sería la piedra angular.

La ratio de personal municipal, especializado y dedicado a la Educación Social, Integración y Animación Sociocultural está muy por debajo de lo necesario y deseable.

En particular, es insuficiente el apoyo que muchos ayuntamientos están ofertando a las personas con menos recursos económicos y más dificultades sociales para mejorar su integración educativa y laboral. Es necesario que se amplíen las acciones para reforzar la empleabilidad de estas personas y grupos.

Hay que mejorar ostensiblemente la coordinación con otras entidades y trabajar en red para mejorar las posibilidades de integración de la población en una situación más vulnerable. Actualmente se están desaprovechando recursos y muchos ayuntamientos deben impulsar el establecimiento de la red y su protocolo de actuación.

A todo ello añadir que al comenzar el año 2017 la aplicación informática del Gobierno de Canarias para la tramitación de la Prestación Canaria de Inserción  se bloqueó y ocasionó numerosos fallos que impedían gestionar nuevas altas y también revisiones y renovaciones.

Hoy por hoy son muchas las personas en esta tierra que tienen necesidad de recursos y la PCI no está siendo el instrumento que les ayude a cubrir sus necesidades básicas. La PCI no es la solución, sino un parche, si se quiere expresar así, tenemos que ir hacia un modelo que aborde esta situación como un derecho que garantice unas condiciones de vida digna para todas las personas, tenemos que ir hacia un sistema de garantía de rentas. Pero mientras, mientras le seguimos exigiendo al Gobierno de Canarias que cumpla sus propias leyes y financie adecuadamente la PCI, los ayuntamientos también podrían ampliar su margen presupuestario para aumentar la partida vinculada a esta prestación y permita, dentro de las limitaciones que ofrece este modelo, atender las necesidades de personas que están padeciendo una situación de pobreza.

Un cambio de modelo: un sistema de Garantía de Renta.

Erradicar la pobreza y la exclusión social en nuestra Isla es algo imposible en el marco neoliberal imperante que, por definición, defiende la competencia y no la solidaridad. Por ello se debe defender un cambio de modelo económico y social, y reclamar un sistema de garantía de rentas que asegure a las personas la satisfacción de sus necesidades desde una lógica de autonomía y dignidad.

Ante los elevados niveles de pobreza y desempleo, en lugar de adelgazar el Estado Social, los gobiernos han de garantizar el bienestar de la ciudadanía y no el de los mercados. Para ello consideramos necesario la implantación de un Sistema de Garantía de Rentas,  la articulación de un sistema de viviendas de alquiler social utilizando el parque de viviendas vacías, el establecimiento de sistemas locales de alimentación basados en la puesta en producción de terrenos baldíos, huertos urbanos y sistemas de intercambio directo entre productores y consumidores, la creación de empleo potenciando las energías renovables, los servicios personales, el turismo sostenible y la promoción de procesos de autogestión ciudadana, entre otras propuestas fundamentales.

Por ello, Unidos Podemos-En Comú-En Marea propuso al Congreso el pasado 9 de abril de 2017 una Propuesta No Legislativa relativa a un  plan de Renta Garantizada basado en prestaciones económicas dirigidas a todas las personas sin ingresos o insuficientes, con el objeto de que no exista en el Estado español ninguna persona por debajo del umbral de la pobreza. En ella, se pide al Gobierno que, en coordinación con las comunidades autónomas y colectivos de la sociedad civil, ponga en marcha un Plan de Garantía de Rentas dirigido a toda la población, cuya duración sea ininterrumpida, que no deje de aplicarse hasta que la persona beneficiaria salga de la situación de exclusión, que tenga carácter complementario a los ingresos si existieran y que se aplique en diferentes fases, dando prioridad a personas desempleadas sin ingresos de ninguna clase y a hogares con menores, y cuya cuantía de esta prestación se sitúe por encima del umbral de la pobreza monetaria con el objetivo de igualarlo al Salario Mínimo Interprofesional.

No obstante, sin salirnos del marco político y económico vigente, hay ejemplos de territorios con sistemas de ingresos mínimos mucho más dignos, eficientes y eficaces que el de la PCI. Así, en el País Vasco existe la Renta de Garantía de Ingresos (RGI), regulada por la Ley 18/2008 de 23 de diciembre para la Garantía de Ingresos y para la Inclusión Social, así como por el Decreto 147/2010 de 25 de mayo de la Renta de Garantía de Ingresos. Tienen derecho a la RGI todas las personas y familias sin recursos económicos suficientes para cubrir sus necesidades básicas. Se tramita en el Servicio Vasco de Empleo (Lambide) y está orientada a facilitar una salida laboral, por lo que ha permitido reducir ampliamente la demanda asistencial en los Servicios Sociales de Base.

En febrero de este mismo año, el Congreso de los Diputados admitió a trámite, con los votos en contra del PP y C´s, la Iniciativa Legislativa Popular presentada por los sindicatos mayoritarios para implantar una Renta Mínima en el conjunto del Estado. Estaría dirigida a las personas sin empleo ni ingresos, demandantes de empleo y su cuantía sería de 426 euros al mes. Aunque esta iniciativa es insuficiente, es positivo que se avance en el sentido de establecer un sistema de garantía de ingresos para toda la ciudadanía.

Mientras, la administración canaria y las corporaciones locales tienen el deber de garantizar los derechos humanos y, por tanto, dar respuesta a las necesidades de la parte de nuestro pueblo que está en una situación de mayor pobreza y vulnerabilidad social.


Por todas las razones expuestas, el Pleno del Cabildo Insular de La Palma ACUERDA:

1.      Exigir al Gobierno de Canarias el aumento de las partidas presupuestarias destinadas a la Prestación Canaria de Inserción, tanto para aumentar el número familias a las que llega, efectivamente, la prestación, y para que su percepción sea inmediata (un mes y , en cualquier caso, apoyo en los posibles meses de espera) para todas las personas que tienen derecho a percibirla, así como para incrementar el personal dedicado a la gestión ágil y eficaz del procedimiento y a apoyar la inserción social, educativa y laboral vinculada a la ayuda en los ayuntamientos. Asimismo se hace imprescindible aumentar su duración actual de dos años al tiempo que sea necesaria en cada caso, esto es, mientras las personas beneficiarias no tengan otros ingresos, e incrementar la cuantía hasta aproximarse al SMI.

2.      Instar de forma paralela desde el Gobierno de Canarias al Ministerio de Hacienda y Administraciones Públicas para que autorice a las administraciones competentes a contratar de manera continua y estable el personal necesario para garantizar el derecho de la ciudadanía a percibir la Prestación Canaria de Inserción y que las personas beneficiarias reciban en tiempo y forma esta ayuda.

3.      Instar a todos los ayuntamientos de la Isla a aumentar la partida presupuestaria municipal dedicada a la Prestación Canaria de Inserción.

4.      Instar a los ayuntamientos a implementar un protocolo que permita reforzar el trabajo en red y optimizar los recursos ya existentes en cada municipio y la puesta en marcha de nuevos proyectos para establecer itinerarios de integración social, educativa y laboral de todas las personas que perciben la PCI en su ámbito territorial.

5.      Exigir a los parlamentos y a los gobiernos estatal y canario que pongan fin a las políticas neoliberales, den marcha atrás a los recortes presupuestarios en servicios públicos esenciales y garanticen los derechos sociales de la ciudadanía.

6.      En particular, instar a dichas administraciones a implementar un Sistema de Garantía de Rentas como derecho subjetivo, sin limitación de tiempo, y con una cuantía equivalente como mínimo al SMI, que unificaría y optimizaría las diferentes modalidades de prestaciones económicas no contributivas, asegurando unas condiciones materiales de vida dignas a todas las personas.








Dailos González Díaz


Tuesday, May 09, 2017

Frente a Frente - 3 de mayo - Héctor Rodríguez Riverol: "Amor, subjetivos teoremas"

Programa Frente a Frente correspondiente al 3 de mayo de 2017, presentado por Dailos González y Pedro el Gasio. En esta ocasión entrevistamos a Héctor José Rodríguez Riverol, quien nos presentará su poemario "Amor, subjetivos teoremas", que cuenta también con las fotografías de Jorge Rodríguez de la Cruz y Juan Manuel Cruz. Nos hablará de poesía, y de la combinación de distintas expresiones artísticas. Acompañamos el programa con música de Acheseté, King Crimson y Fela Kuti, además de fondos de Richard Clayderman y el "Disparando palabras" semanal de Daniel Olivera.


 

Sunday, May 07, 2017

El problema no es Macrón o Le Pen


Sobre Francia.

El problema no es sólo Marine Le Pen, pues entraríamos en esa visión errónea muy popular en EEUU de que, si Hitler se hubiera muerto antes, no habría habido nazismo. El problema, parafraseando a Rajoy, es que "es el vecino quien elije el alcalde", y es el vecino quien, no sólo vota a Le Pen, sino que es también quien discrmina y ataca a sus vecinos migrantes, al igual que eran los vecinos quienes denunciaban a las autoridades del Tercer Reich que en la casa de enfrente había judíos escondidos.

El auge del fascismo es sólo el síntoma, no sólo del descontento ante algunas consecuencias del neolberalismo, sino también de que desde la izquierda se fue incapaz de elaborar una alternativa creíble y plausible (y capaz de llegar al poder para hacer cosas distintas, no sólo para protestar).

Macrón representa precisamente las políticas que alimentan a su "antagonista" Le Pen, o peor dicho, gente normal y corriente, el vecino que parecía ser buena persona porque siempre saludaba y luego resulta ser un racista de miedo. No podemos dejar que el "multiculturalismo" quede asociado a políticas económicas neoliberales porque entonces habremos perdido (lo peor es que Macrón ni siquiera es un paladín del multiculturalismo ni un Manu Chao).